Quiénes somos
El Movimiento de Ciudadanos hacia la República Constitucional (MCRC) fue fundado en 2006 en España por Antonio García-Trevijano Forte. Posteriormente, adoptó el carácter de asociación cultural y prepolítica.
Los miembros del MCRC afirmamos que en España no hay democracia, sino un Estado de partidos o partidocracia, y que la nación española todavía no ha conquistado su libertad política colectiva.
Por ello, el MCRC busca la apertura de un período de libertad constituyente, durante el que el pueblo español pueda elegir el sistema político. En ese período, nosotros propondremos la república constitucional, el único sistema político que cumple con los requisitos de la democracia: la representación ciudadana, la separación de los poderes ejecutivo y legislativo y la independencia judicial. Esto se consigue mediante:
La elección de diputados de distrito por el sistema uninominal mayoritario, el único que garantiza la representación política de los ciudadanos.
La elección directa del jefe de Estado y Gobierno en distrito nacional único por todos los ciudadanos.
La elección directa del presidente del órgano de gobierno de la justicia por todos los profesionales jurídicos.
La Monarquía de partidos actual impide la libertad política y carece de autoridad para garantizar la unidad de la conciencia española. Por ello debe ser sustituida por una república constitucional, que nada tiene que ver con la II República española, cuya arquitectura institucional tenía graves defectos y no era democrática.
Somos conscientes de que se puede alcanzar un período de libertad constituyente si una minoría, la parte más civilizada e innovadora de la nación, orienta a esta mediante una presencia activa en la sociedad civil, para conseguir un nivel significativo de abstención en un régimen electoral fraudulento que impide la libertad política, de forma que quede deslegitimado.
Los miembros del MCRC somos repúblicos y abstencionarios.
Ser repúblico
Los vocablos «republicano» y «repúblico» no significan lo mismo. Tomamos por republicano, por un lado, a todo sujeto perteneciente a una república, al habitante de la misma, y, por otro lado, a todo aquel que sea partidario de la república, pero de forma pasiva. Sin embargo, denominamos repúblico al ciudadano activo, versado en el conocimiento de la res publica, que actúa para que la república sea instaurada. El vocablo «repúblico» se encontraba en desuso y fue reutilizado por Antonio García-Trevijano en el sentido arriba expuesto.
Ser abstencionario
Las palabras «abstencionista» y «abstencionario» tampoco tienen el mismo significado. Abstencionista es todo aquel que —con independencia de sus motivos— se abstiene en unas votaciones. Abstencionario, sin embargo, es el ciudadano activo que, de manera consciente, decide abstenerse en unas votaciones con el propósito de contribuir a la deslegitimación del régimen político. El vocablo «abstencionario» fue acuñado por Antonio García-Trevijano en el sentido arriba expuesto.